Por: Fernando Villavicencio Valencia
Luego
de cinco años en el poder, el presidente Rafael Correa, basado en una
publicación del diario oficial, El Telégrafo, denunció un perjuicio al
Estado de U$ 4 mil millones en telefonía celular, durante los años 1996 y
2008, pero guardó silencio respecto a lo ocurrido con los nuevos
contratos suscritos en su gobierno, con las mismas operadoras (América
Móvil de México y Telefónica de España). En esta investigación daremos
un salto digital al espectacular mundo de las ganancias en tercera y
cuarta generación, en tiempos de revolución.
A
cuatro meses de inaugurada la revolución ciudadana, en mayo del año
2007, el presidente Rafael Correa, advirtió al hombre más rico del mundo
(Carlos Slim), sobre los riesgos de la monopolización del espectro
radioeléctrico: “Es
un peligro que el señor Slim esté monopolizando telecomunicaciones a
nivel de América Latina y en Ecuador, pero aquí hay un gobierno altivo y
soberano que no permitiremos monopolios privados en servicios
fundamentales para la población”,
dijo el mandatario. Un año después, agosto de 2008, bajo su
responsabilidad y decisión, en el palacio de Carondelet, junto a Vinicio
Alvarado, Carlos Mandujano (Cuarto de Guerra) y Daniel Hajj, presidente
de
América
Móvil, y yerno de Slim, se selló el acuerdo por 15 años adicionales, en
el cual la empresa del magnate (CONECEL-CLARO), se comprometía a
entregar al Estado U$ 480 millones por derechos de concesión. Un acuerdo
similar se alcanzó con Telefónica de España (OTECEL-MOVISTAR), pactando
un pago de U$ 206 millones, por idéntico período de concesión.
De
los U$ 686 millones acordados con las dos empresas, el gobierno recibió
a valor presente, U$ 289 millones de Claro y U$ 60 millones de
Movistar. Por los dos rubros, ingresaron al país U$ 349 millones,
mientras los U$ 337 millones faltantes, serían cancelados durante los 15
años de vigencia del contrato. A
estas cifras se han sumado pagos parciales de U$ 66.5 millones de
Claro, y U$ 52.74 millones de Movistar, entregados durante los años 2009
y 2010. En total, hasta la fecha, el duopolio ha cancelado por derechos
de concesión, la cifra de U$ 468,24 millones: U$ 112, 74 millones de
Movistar y U$ 355.5 de Claro. Según
la SENATEL, durante los 15 años, los ingresos para el
Estado
oscilarían entre U$ 1.200 y 1500 millones, incluyendo un 2,93% por
facturación que las empresas deben cancelar cada tres meses al organismo
regulador, como establece la clausula 18.2 de los contratos.
Mega negocios en la banda de 1900 MHz
Sin
duda, los contratos suscritos el 2008 mejoraron los ingresos por
concesión, comparados con los registrados los años 1993, 1996, y con los
previstos el 2006, en el gobierno de Alfredo Palacio, que no superaban
los U$ 60 millones por operadora; sin embargo, lo que oculta el gobierno
y la investigación del Telégrafo es que el régimen del Presidente
Correa, entregó a Claro y Movistar, a más de la banda de 850 MHz (STMC),
la banda adicional de 1900 MHz, para tercera y cuarta generación,
Servicio Móvil Avanzado-SMA, una verdadera autopista para negocios de
servicios convergentes, a costos insignificantes comparados con la
rentabilidad que genera.
La
firma de esos contratos implicó la adjudicación directa, de una nueva
frecuencia de espectro de 10 MHz, en la banda de 1.900 MHz para el
Servicio Móvil Avanzado SMA que, de acuerdo con la Ley de
Telecomunicaciones y el Reglamento de SMA, debía ser objeto de
licitación pública internacional. Según la normativa lo único posible de
renegociarse era el Servicio de Telefonía Móvil Celular (STMC) en la
banda de 850MHz. Incluso el informe elaborado por la Organización de
Estados Americanos (OEA) el año 2006, señalaba que: “… la renovación
de los contratos bajo el SMA, en vez de STMC / 96 no es adecuada. Por
tanto, en caso que el Estado requiera que las concesiones sean regidas
por otro régimen, deberían convocar una licitación pública de acuerdo
con el Reglamento de Concesiones, no una
‘renegociación’.”
A
raíz de la renegociación, se consolidó el dominio del mercado por parte
del duopolio Claro-Movistar, con el 98.05 % de los abonados, mientras
la estatal Alegro (CNT) bajó del 4% el año 2008 a 1,95% en octubre del
2011, una tendencia en picada que le precipitará al silencio.
Actualmente, los abonados de telefonía móvil llegan a 15´868.012: 271.144 de Alegro, 4´501.472 de Movistar y 11´057.121 de Claro. La
mayoría de usuarios en el país tienen terminales con tecnología GSM.
Llegando a un total de 14'008.787 líneas activas a julio de 2011.
Mientras que con la tecnología UMTS existen 1'222.263 líneas. La
Tecnología UMTS se emplea principalmente para la transmisión de datos
(Internet Móvil). Claro tiene el 88.46% de líneas activas UMTS. Los
usuarios GSM de CNT
(Alegro) emplean la red GSM alquilada por Movistar, toda vez que la
estatal inició sus operaciones el año 2003 con CDMA, una tecnología
desfasada en el mercado. En la actualidad existen en el país 3
diferentes tipos de tecnologías móviles: CDMA, GSM y UMTS, la segunda de
ellas opera en las bandas de 850 y 1900 MHz. Claro tiene implementadas
las tecnologías GSM y UMTS, siendo además el operador que tiene la mayor
cantidad de radio bases.
La
horfandad de abonados móviles de la estatal CNT (Alegro), se expresa
también en las pérdidas económicas heredadas, superiores a U$ 220
millones hasta el año 2009, las cuales fueron licuadas en la absorción
del año 2010. Si a esto sumamos las pérdidas acumuladas de Pacifictel,
de U$ 94.4 millones, asumidos también por la flamante empresa pública
CNT en el gobierno de Correa, nos encontramos frente a un inminente
apagón de la telefonía móvil estatal, y a serios inconvenientes incluso
para los servicios tradicionales de telefonía fija, internet y otros.
Pero, el gobierno de Rafael Correa no solo absorvió las pérdidas de
Pacifictel y Alegro, sino también a los funcionarios de esas empresas,
responsables de la crisis, corrupción y quiebra, en los gobiernos de
Lucio Gutierrez y Alfredo Palacio, quienes pasaron a ocupar puestos
estelares en el Ministerio de Telecomunicaciones (Mintel), CNT, CONATEL
y SENATEL, durante el presente régimen.
Líneas activas a septiembre de 2011
(Mintel)
|
Empresa
|
Número de líneas
|
Participación %
|
CONECEL (Claro)
|
11´057.121
|
69,68%
|
OTECEL (Movistar)
|
4´501.472
|
28,37%
|
CNT EP (Alegro)
|
309.419
|
1,95%
|
TOTAL
|
15´868.012
|
100,00%
|
Fuente: Ministerio de Telecomunicaciones (Mintel)
De
acuerdo con los estados financieros, la transnacional española Movistar
invirtió en Ecuador entre los años 2008 y 2010, U$ 376 millones. Para
el mismo período, Claro reportó inversiones del orden de U$ 632
millones, entre tanto la estatal Telecsa (Alegro) invirtió el año 2008
U$ 6.6 millones, no ha reportado inversiones, ni entregado los estados
financieros correspondiente a los años 2009 y 2010, según el Mintel.
Ingresos por facturación: Claro y Movistar
(Expresado en millones de dólares) Mintel
|
COMPAÑÍA
|
2008
|
2009
|
2010
|
TOTAL
|
OTECEL (Movistar)
|
472,65
|
479,83
|
524,41
|
1.476,89
|
CONECEL (Claro)
|
1054,29
|
1140,77
|
1235,75
|
3.430,81
|
TOTAL
|
1526,94
|
1620,60
|
1760,16
|
4.907,70
|
Fuente: Estados Financieros Auditados CONECEL y OTECEL.
Las
cifras oficiales reportadas por el Ministerio de Telecomunicaciones a
la Asamblea Nacional, hablan de espectaculares ingresos de las
operadoras privadas. Entre los años 2008 y 2010, las dos compañías
facturaron U$ 4.907 millones: U$ 3.430 millones correspondientes a Claro
y U$ 1.476 millones a Movistar. Si consideramos para el año 2011 una
cifra similar a la del 2010, de U$ 1760 millones de las dos compañías,
tendríamos un ingreso total por facturación, de U$ 6.667 millones, en
apenas cuatro anos, de los 15 de vigencia de los contratos, frente a U$
1.008 millones reportados por inversiones de las dos transnacionales en
igual período. De acuerdo con las cifras oficiales, en un poco menos de
cinco meses de facturación, se habría cubierto la totalidad de la
concesión. En apenas 4 años, las dos operadoras
alcanzaron el total de ingresos reportados durante todo el periodo de
vigencia del contrato anterior, 1996- 2008.
Entre
los años 2008 y 2010, Claro y Movistar, declararon U$ 317.7 millones
por concepto de Impuesto a la Renta, U$ 257 millones de Claro y U$ 60
millones de Movistar, según informacion del Servicio de Rentas Intertas
SRI. De
acuerdo al Informe de la SENATEL de 3 de septiembre de 2011, Porta-Claro
no pagó al Estado el Impuesto a la Renta desde los años 2003 al 2006;
tampoco el Impuesto al Valor Agregado (IVA), desde 2004 hasta 2006; el
Impuesto a los Consumos Especiales (ICE), entre 2004 y 2006, ni
retenciones, durante el mismo período, resultando un total de USD 103
millones de evasión tributaria. Esta información conocían las
autoridades del gobierno y el propio Presidente Rafael Correa, sin
embargo de lo cual se renegoció el contrato.
Impuesto a la Renta global: Claro y Movistar
(Servicio de Rentas Internas)
|
|
2008
|
2009
|
2010
|
TOTAL
|
OTECEL (Movistar)
|
17´287.223
|
20´215.428
|
22´597.899
|
60´100.550
|
CONECEL (Claro)
|
81´163.322
|
104´066.979
|
72´364.752
|
257´595.053
|
TOTAL
|
98´450.545
|
124´282.407
|
94´962.651
|
317´695.603
|
Fuente: Servicio de Rentas Internas, noviembre de 2011
El acuerdo con Carlos Slim
La
negociación con Porta (Claro) se llevó al más alto nivel. Recordemos
que el contrato fue revertido al Estado por disposición del presidente
Correa; pero, horas después, vino una contraorden. En efecto, el acuerdo
con Porta estuvo precedido de una llamada telefónica del presidente
mexicano Felipe Calderón, un “buen amigo” de Carlos Slim, para que el
mandatario ecuatoriano reciba en Quito, al hijo político del magnate
mexicano-líbanes y presidente de América Móvil, Daniel Hajj. A criterio
del economista Correa, fue una negociación inédita en la región: “Nunca
se había negociado así en América Latina..no sólo lo hemos hecho
extraordinariamente bien, sino que somos los primeros en usar un nuevo
hito en las negociaciones de esta clase de espectro en la región.”, señaló entonces, en
una de
sus cadenas sabatinas.
Por
su parte, el actual Ministro de Telecomunicaciones, Jaime Guerrero,
cuando presidía el CONATEL y la SENATEL, confirmó y justificó la
intervención del gobierno mexicano, en la negociacion con Porta. “Cuál
es el pecado de que luego de que el Consejo canceló la negociación me
pida el Presidente de la República: ‘son 7 millones de usuarios, ya el
señor (Hajj) dijo que va a pagar, abra la negociación de nuevo”, mencionó.
A
la participación del presidente Felipe Calderón, se sumó la de Carlos
Mandujano, de la consultora Cuarto de Guerra, quien fue uno de los
asesores publicitarios en la primera campaña de Rafael Correa, y creador
de las sentidas consignas socialistas: “Pasión por la Patria” y “Socio País”.
Mandujano fue quien presentó a Correa con Slim en la cena ofrecida por
el presidente mexicano al mandatario ecuatoriano. El socio de Cuarto de
Guerra, aparece vinculado al derechista Partido Acción Nacional-PAN y a
Carlos Slim.
El
acuerdo con Porta (Claro) también reveló una doble posición
gubernamental. En mayo del 2007, el presidente Correa denunció que “la privatización ha sido un desastre en este país”
y advirtió del grave peligro de la expansión del imperio “Slim” en
América Latina. Correa añadió que su gobierno preparaba una ley para
evitar la presencia de monopolios en las áreas estratégicas de la
economía nacional como las telecomunicaciones. “Estamos elaborando una ley antimonopolio”,
declaró el Mandatario frente al interés de Telmex, también de propiedad
de Carlos Slim, por adquirir acciones en empresas del sector. Varios
días después de esta advertencia, Slim con su empresa Telmex, compró
Ecuador Telecom (Ecutel), compañía vinculada a Juan José
Vivas, que tiene una concesión por 15 años otorgada el año 2002 por el
gobierno de Gustavo Noboa, para prestar servicios de telefonía
inalámbrica fija, a escala nacional, larga distancia, telefonía pública,
transmisión de datos e internet. Luego de la firma del contrato, Telmex
con “bombos y platillos” inició la competencia a la Corporacion
Nacional de Telecomunicaciones CNT, en el mercado de telefonía fija
inalámbrica, internet y otros servicios.
Irónicamente,
en un gobierno autoproclamado socialista, el magnate Carlos Slim tiene
el control del 70% del mercado de telefonía móvil, servicios de tercera y
cuarta generación y un importante nicho del mercado de telefonía fija,
internet y demás servicios convergentes.
Si
bien los nuevos contratos permitieron una reducción del techo tarifario
de U$ 0.50, a U$ 0,22 por minuto para el servicio de telefonía móvil,
poco se ha hecho para regular los otros servicios adicionales,
especialmente la aplicación de operador dominante a Claro. Pese a
existir una reducción de las tarifas, siguen siendo de las más altas en
la región, y nada se hace para evitar el discrimen entre los usuarios de
pre y post pago. Además, con los contratos suscritos con el duopolio,
se perdonó 15 años de ilegalidades y abusos como, por ejemplo, el
redondeo, multas irrisorias de U$ 200 y, evasión tributaria, denunciado
por el propio presidente Correa: “No me vengan con que cinco años han perdido plata y pagan cero de Impuesto a la Renta.” El
presidente acusó a Porta por haber presentado pérdidas ficticias entre
los años 1999 y 2003 para no pagar el Impuesto a la Renta.
La Superintendencia
de Telecomunicaciones-Supertel, acusó a Porta de haber fijado
arbitrariamente las tarifas y señaló que, debido a la publicidad
engañosa, el perjuicio calculado era de U$ 700 millones de dólares.
Asimismo, el redondeo de 27 millones de dólares denunciado por la
Defensoría del Pueblo y las acciones legales emprendidas por la Supertel
debido a fallas en el servicio, que podrían haber sido causales para
caducidad contractual, se quedaron en amenazas vanas y altisonantes.
Claro: marca no registrada
Las
empresas de Carlos Slim en Ecuador, actúan juntas, ejerciendo prácticas
monopólicas reñidas con la normativa vigente, revela el Informe Técnico
Legal presentado por la Senatel, el 30 de septiembre de 2011, en el
cual se acusa a Claro, de ejercer una alianza con su hermana Telmex
(Ecutel), ofertando servicios sobre los cuales no tienen derechos. La
Senatel remitió un oficio a Claro, notificando los resultados del
monitoreo de medios, relacionados con la difusión de publicidad
engañosa, dice el informe: “A través de una imagen comercial
avasalladora en los medios de comunicación social, se ha presentado al
público usuario y público en general a la marca CLARO como aquella que
ampara servicios de telecomunicaciones en general, sean éstos de
telefonía móvil, telefonía fija, Internet móvil, Internet fijo,
televisión digital;
generando una idea errónea en la sociedad, o alejada de la realidad,
puesto que se dice por una parte que PORTA ahora es CLARO, y habiendo
sido aquella o siendo aún aquella de propiedad de CONECEL S.A., es
evidente que el público piense que todos los servicios de
telecomunicaciones que se le presentan a la vista corresponden a un
mismo titular, esto es CONECEL S.A”. Adicionalmente, comunica que Claro no está reconocida en el Instituto Ecuatoriano de Propiedad Intelectual-IEPI: "CLARO" no es una marca registrada por "AMERICA MÓVIL", por lo que el órgano regulador sostiene: “sería imprecisa la información contenida en la publicidad”, por
cuanto CONECEL no tienen títulos habilitantes para ofertar esos
servicios, en el contrato suscrito el 26 de agosto de 2008. Ante ello,
la SENATEL requirió a CONECEL “se abstenga de emitir publicidad que pudiere resultar engañosa, y consecuentemente, induzca a cometer errores a
consumidores y usuarios de los servicios de telecomunicaciones”. El
reclamo quedó ahí, en reclamo, hasta la fecha, Claro no ha dado
respuesta. Las autoridades reguladoras y de control, se llenan de
oficios y estudios que se apilan en los archivos de la impunidad.
Claro: operador dominante
Con
base en la normativa vigente, Claro debía ser calificada como operador
dominante hace varios años, con los propósitos de impedir prácticas
monopólicas, competencia desleal, acumulación de ganancias ilegales, y
proteger al consumidor.
Luego
de constantes presiones de Alegro y Movistar, desde el año 2008,
finalmente, el 30 de julio de 2010, el CONATEL declaró Operador
Dominante a la compañía CONECEL CLARO. Varios estudios contratados en el
sector coinciden respecto a las enormes ventajas de la empresa mexicana
sobre las otras operadoras. “Si bien el mercado SMA ecuatoriano está
compuesto por 3 operadoras, en términos prácticos es un duopolio
bastante inequitativo, en el que OTECEL (Movistar) no ha podido,
consolidarse en una empresa que ofrezca una suficiente presión
competitiva a CONECEL”, sostiene el informe técnico legal, presentado por la SENATEL.
Según el Capítulo IV del reglamento de telecomunicaciones, “se
considera como operador dominante al proveedor de servicios de
telecomunicaciones, que haya tenido, al menos, el treinta por ciento de
los ingresos brutos, de un servicio determinado, en el ejercicio
económico inmediatamente anterior, o que, en forma efectiva, controle,
directa o indirectamente, los precios en un mercado”. Desde la
declaratoria de operador dominante han transcurrido 17 meses y no se
aplica ninguna medida para defender los derechos de los usuarios,
controlar los abusos del mercado, y proteger los intereses del Estado,
pese a que se han realizado una serie de consultorías, e impartido
disposiciones a los organismos de regulación y control.
Declarar
la dominancia a un operador permite crear una regulación asimétrica del
mercado, lo cual puede repercutir en bienestar del mercado y del
consumidor, establecer planes tarifarios a costos inferiores, facilitar
la interconexión, y el acceso a la infraestructura, entre otras. Por
ejemplo, en el caso de Claro, si se disminuyen los cargos de
interconexión, incluso si se reducen a CERO (es decir los costos de
conectarse entre un usuario de Claro con un usuario de otro operador
móvil o viceversa), los costos de llamadas off-net (es decir llamadas
entre diferentes operadoras) de móvil a móvil disminuirán. Por lo que es
muy importante que el organismo regulador aplique las medidas
regulatorias dispuestas desde hace varios meses, como costos de
interconexión asimétricos entre operadores móviles, medidos desde el
operador dominante, o incluso costo CERO
por interconexión.
De
las cifras proporcionadas por los organismos de telecomunicaciones, se
puede advertir el ocaso de la empresa pública CNT-Alegro. Las causas son
varias: desde la irresponsable adquisición de tecnología desfasada
(CDMA) en el gobierno de Lucio Gutiérrez, una administración ineficiente
y vinculada a negocios dolosos en la provisión de equipos, hasta la
responsabilidad central imputada al actual gobierno, por haber entregado
sin licitación, a precios insignificantes, el 98% del mercado de
telefonía móvil y servicios convergentes, a un duopolio, liderado por
Carlos Slim Helú. Cuatro años después de renegociado el contrato con
Correa, y de haber amasado impresionantes ganancias en Ecuador, el “Rey
Midas” como se lo conoce al mexicano-libanés, ha colmado de elogios al
presidente socialista ecuatoriano, en el marco del XVI Congreso de
Ingeniería de México, realizado el 11 de noviembre de 2011: "Gobiernos
como el de Ecuador han entendido muy bien la importancia de la
cobertura, pues ha permitido realizar las inversiones necesarias para
que sus habitantes tengan las suficientes vías de telecomunicación".
Lujosas palabras para un magnate que no habla como gana, pero gana de
los que hablan, y mucho más encarecidas expresiones si van dirigidas a
alguien como Rafael Correa que, cuatro años atrás amenazó a Slim, con
echarlo del país por monopolista y evasor de impuestos. Son las
historias off net, de ricos y famosos, que no están en las primeras
planas de los medios oficiales, ni siquiera en las páginas de farándula
de algunos “enteros” opositores.